Cuento | Recurso gratuito
Copyright © Alicia Abatilli 2025. Todos los derechos reservados. Prohibida su venta o distribución.
Queridos colegas y amigos:
Hoy quiero compartir con ustedes "La Clase que nunca terminó", un cuento que nace del lugar donde todo es posible: la imaginación. En él, la señorita González lleva a sus alumnos a un espacio suspendido, un rincón de la escuela donde las palabras se transforman en flores, donde las raíces no buscan agua, sino que absorben lo que no decimos. A través de este relato, los invito a reflexionar junto a los estudiantes sobre la importancia de cultivar la imaginación y los valores.
Este cuento busca invitarnos a un viaje hacia lo profundo, a un lugar donde las ideas se nutren de lo invisible, donde las preguntas no tienen respuestas fáciles, pero las respuestas más sinceras brotan de nuestras raíces. La clase, como tantas veces en nuestras vidas, parece terminar, pero queda esa sensación inexplicable de que algo ha cambiado, algo que no podemos explicar con palabras, pero que sí se siente.
Es un relato que los invito a trabajar con los estudiantes, para que encuentren, tal vez por primera vez, el poder de imaginar más allá de lo que los ojos pueden ver, de ver las raíces invisibles que crecen dentro de ellos mismos. No solo se trata de aprender ecuaciones, de llenar mentes con conocimiento abstracto, sino de sembrar, en el corazón de cada uno de ellos, la semilla de la curiosidad y la empatía, que con el tiempo, crecerá en un árbol de valores y sueños.
Los animo a que, como la señorita González, no dejemos de sembrar dudas, de hacerles preguntas que no se pueden responder inmediatamente, pero que dejan una huella en el alma, porque al final, siempre es en ese rincón de la escuela donde el tiempo no existe, donde los valores más grandes se cultivan, donde nuestros estudiantes pueden aprender a ver el mundo con nuevos ojos.
Espero que disfruten de este cuento tanto como yo lo disfruté al escribirlo, y que sirva de inspiración para los momentos mágicos que aún podemos crear con nuestros estudiantes.
Con cariño:
No se olviden que siempre pueden comunicarse conmigo enviando un mensaje al 📲 03442 67-5917. También pueden encontrarme en Facebook y en Instagram.
Pueden descargar el material de manera gratuita desde el ENLACE 👆 o haciendo click en la IMAGEN de más abajo 👇.
Se prohíbe la venta, distribución, publicación o difusión de este material en cualquier plataforma, red social o sitio web que permita la descarga o compartición de documentos, como Scribd, Studocu y similares. Está prohibido compartir, reutilizar, desarrollar, modificar o editar este trabajo sin la autorización expresa y por escrito de la titular de los derechos.
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Este cuento busca invitarnos a un viaje hacia lo profundo, a un lugar donde las ideas se nutren de lo invisible, donde las preguntas no tienen respuestas fáciles, pero las respuestas más sinceras brotan de nuestras raíces. La clase, como tantas veces en nuestras vidas, parece terminar, pero queda esa sensación inexplicable de que algo ha cambiado, algo que no podemos explicar con palabras, pero que sí se siente.
Es un relato que los invito a trabajar con los estudiantes, para que encuentren, tal vez por primera vez, el poder de imaginar más allá de lo que los ojos pueden ver, de ver las raíces invisibles que crecen dentro de ellos mismos. No solo se trata de aprender ecuaciones, de llenar mentes con conocimiento abstracto, sino de sembrar, en el corazón de cada uno de ellos, la semilla de la curiosidad y la empatía, que con el tiempo, crecerá en un árbol de valores y sueños.
Los animo a que, como la señorita González, no dejemos de sembrar dudas, de hacerles preguntas que no se pueden responder inmediatamente, pero que dejan una huella en el alma, porque al final, siempre es en ese rincón de la escuela donde el tiempo no existe, donde los valores más grandes se cultivan, donde nuestros estudiantes pueden aprender a ver el mundo con nuevos ojos.
Espero que disfruten de este cuento tanto como yo lo disfruté al escribirlo, y que sirva de inspiración para los momentos mágicos que aún podemos crear con nuestros estudiantes.
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